Se firmó el Decreto 541 por medio del cual se crea el Sistema Distrital de Formación Artística y Cultural y se reglamenta el funcionamiento de los Centros de Formación Musical y Artística. El objetivo es beneficiar a toda la población de Bogotá, ampliando las posibilidades de oferta, acceso y calidad a la formación artística y cultural. Descargue el Decreto.
El Sistema sirve de instancia de participación, concertación, articulación, formulación y puesta en marcha de las políticas y acciones de los agentes públicos y privados orientadas al desarrollo de la formación artística y cultural en Bogotá. También permitirá la movilización de voluntades, el desarrollo de iniciativas, la articulación y el diálogo entre las organizaciones artísticas y culturales, las instituciones educativas y las entidades públicas.
Con este decreto, la formación artística y cultural en el país deja de ser un tema complementario ya que se empieza a desarrollar ampliamente en el marco jurídico y en la agenda política, reconociéndola como una dimensión significativa que garantiza una educación integral y equitativa, generando las condiciones para el ejercicio efectivo y progresivo de los derechos culturales de los habitantes de Bogotá.
El Distrito Capital es el primer ente territorial que adopta el Sistema de Formación Artística y Cultural que la Ley 397 de 1997 creó con el propósito de estimular la creación, la investigación, el desarrollo, la formación y la transmisión del conocimiento artístico y cultural. Se espera que en el futuro próximo se implemente este sistema a nivel nacional.
El Decreto 541 de 2015 es el resultado del posicionamiento de la formación artística y cultural impulsado por la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, en coordinación con el Instituto Distrital de las Artes y la Orquesta Filarmónica de Bogotá, entidades que pusieron en marcha los Centros Locales de Arte para la Niñez y la Juventud-CLAN y los Centros Locales Orquestales para atender los procesos de formación artística de niños, niñas, adolescentes y jóvenes en Bogotá.
En estos espacios se reconoce que las artes ofrecen elementos fundamentales para el ejercicio de la ciudadanía y la formación de la subjetividad, al brindar herramientas para el desarrollo de la sensibilidad, la experiencia estética, el pensamiento creativo y la expresión simbólica.
“Nadie enseña a escribir salvo los buenos libros, leídos con la aptitud y la vocación alertas. La experiencia del trabajo es lo poco que un escritor consagrado puede transmitir a los aprendices si éstos tienen todavía un mínimo de humildad para creer que alguien puede saber más que ellos. Para esto no haría falta universidad, sino talleres prácticos y participativos, donde escritores (y los artesanos-y músicos, pintores, escultores, arquitectos, cineastas, bailarines y poetas de la tradición oral...) discutan con los alumnos la carpintería del oficio: cómo se les ocurrieron sus argumentos, cómo imaginaron sus personajes, cómo resolvieron sus problemas técnicos de estructura, de estilo, de tono, que es lo único concreto que a veces puede sacarse en limpio del gran misterio de la creación".
Gabriel García Márquez