El pasado fin de semana, unos 13 mil espectadores asistieron al Parque de los Novios para reencontrarse con sus raíces y disfrutar de Colombia al Parque, el festival que rescata los sonidos modernos y clásicos de nuestro país.
El Instituto Distrital de las Artes –Idartes-, entidad adscrita a la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, reunió 17 agrupaciones que le entregaron a la ciudad lo mejor de los ritmos nacionales en un evento que, en su decimoquinta versión, puso en escena algunas de las más representativas agrupaciones del momento.
La fiesta comenzó a la una de la tarde del sábado con la presentación de Tropicácidos, el grupo de los Centros Locales de Artes para la Niñez y la Juventud –CLAN. Luego pasaron por el escenario del Parque de los Novios la Banda Vocal Nvoz, Laura Kalop, Expresión, Faoba, Guafa Trio, Morenabeat y Madou Zon Family, que vino desde Burkina Faso a demostrar por qué son reconocidos en todo el mundo y dejar al público cautivo con la magia de su fuerza africana y sus incansables tambores.
El cierre del sábado estuvo a cargo de la champeta arrolladora de Abelardo Carbonó, que inundó la capital con las notas de su guitarra y el alborozo propio de Ciénaga, el municipio que lo vio nacer.
El joropo de Alejandro López abrió la segunda jornada del festival. A la rumba llanera le siguieron las presentaciones de Voz Con 2, Juventud Parrandera, Alfredo Gómez y los Hijos de Majagual, Los Parientes, Absalón y Afropacífico, Caribbean New Style y Ensamble pacífico, quienes pusieron la nota final a un festival que, además, fue una vitrina para decenas de emprendedores del sector, que pudieron promocionar y vender sus productos.
“Fue una responsabilidad grande y un honor ser los encargados de cerrar este bonito festival, donde mostramos todo lo que somos: la fuerza, la alegría y la pasión”, dijo el maestro Hugo Candelario González poco antes de bajar de la tarima donde celebró la creatividad colombiana que marcó la pauta durante todo el festival.
El componente académico se desarrollará hasta el próximo 25 de agosto, brindándole a los asistentes 18 talleres gratuitos con algunos de los invitados especiales al Festival.
“Estamos demostrando una vez más que Bogotá es una ciudad musical, en donde se viven, se sienten, se disfrutan y se fomentan los ritmos nacionales”, señaló Juan Angel director del Idartes, destacando la diversidad cultural que acompañó este festival y la participación de grupos de las diferentes regiones del país.