El cuarto de San Alejo, aquel lugar oscuro y olvidado de nuestra casa que resguarda nuestros recuerdos y miedos de infancia, destinado al polvo y al silencio. Ese parecería ser el destino de este lugar, pero este no es el caso.
“Un día salí a caminar con un tío, en una prendería había una vieja guitarra, mi tío, - más allá de la situción económica – no duda en regalármela, ahí empezó todo, ahora soy músico”. Mientras entramos al sótano de la casa de la Juventud de la Localidad de los Mártires, me entrega una tarjeta de presentación que dice Treffy, y en ella una ilustración de un jóven con una guitarra y con cara de disfrutar de lo que está haciendo.
Treffy tiene 23 años, es estudiante de último semestre de Educación Comunitaria con énfasis en Derechos Humanos, músico, poeta, objetor de conciencia y productor empírico, ¿ que sale de esta mezcla me pregunto ? y la respuesta es contundente; “Treffy”
Al igual que todo gestor cultural, - entiéndase este término como “cualquier ciudadano, que sin ánimo de lucro se la juega por promover el arte y la cultura en su territorio”, - su vida está llena de proyectos cumplidos y por cumplir, los primeros cargados de un alto grado de satisfacción y los segundos de un alto grado de optimismo. Esta es una de esas historias cargada de eso, de ¡optimismo!
¡Grabando, no molestar !
La Casa de la Juventud de la localidad de los Mártires tenía su cuarto de San Alejo, frío, húmedo y aislado del ruído que consume la ciudad, el escenario perfecto para que una mente inquieta empezara a soñar un estudio de grabación. Muchos cables salen de algún lado y no se saben para dónde van. ¡Siga se sienta y ya le cuento de dónde sale este estudio ! ¿si ve esa pared ? es una mesa de pin pong, la sacrificamos para poder separar la sala de grabación con la sala de control, el vidrio es de un viejo refrigerador que nos encontramos en la calle, sirve para aislar el sonido y nos da visual sobre los músicos, y las espumas que están por todas las paredes las conseguimos de recorridos que hicimos por varias empresas de la localidad, el piso me lo regaló una amiga de un jardín infantil, y los equipos que salieron de un dinero del Distrito, - algo así como el Frankenstein del sonido digo yo- , tal cual, responde, ni más ni menos.
Dos años les ha llevado diseñar este estudio de grabación que sale de la iniciativa de aprovechar un espacio que estaba sirviendo de archivo a la Casa de la Juventud. En eso trabajan a diario desde el 2015 un grupo de jovenes músicos, con más ganas que recursos, y que a través del Colectivo Pseudolente le intentan dar vida a las ideas que rondan sus cabezas. Azulado Swing&blues es uno de esos grupos que algún día llegó al estudio con letras y melodías guardadas en un viejo estuche de guitarra, desempolvarlas y darles forma no fue fácil, pues el proceso llevó un año, “cacharriando” hasta lograr un producto presentable “pues acceder a un estudio no es muy fácil, siempre cuesta” afirma Nestor lider de la banda.
Así como esta banda, Pseudo Studio recibe a semanalmente a todos los músicos de la escena local que buscan oportunidades de grabación a cambio, solo se exige cuidado y respeto de los implementos y “no beber ni fumar” dice Treffy, el resto se permite en exceso, sobre todo la creatividad y el compromiso.
“Un día vinieron unos manes super duros a grabar, traían su productor y los músicos no se equivocaban, eso me gustó mucho” decía Treffy mientras me mostraba en el computador el resultado de la grabación. “de eso se trata, de aprender de todos un poquito”
Pero no solo de música vive el grupo, su gestión abarca la creación de espacios culturales en diferentes ámbitos, por ejemplo el encuentro de Poetas y Escritores, que ya va por su segunda versión, y que anualmente recibe a diferentes artistas locales.
La localidad de los Mártires está llena de líderes y gestores culturales, basta esculcar la vida de estas personas para descubrir que los buenos somos más, que los sueños – aunque sean reciclados – siempre se cumplen y que los proyectos no dependen siempre de una iniciativa política, pues de un impulso ciudadano siempre salen frutos.
!Grabando no molestar! dice a la entrada del estudio, se alista ya el turno de la tarde y el equipo de producción se dispone para el ensayo, se encienden los equipos y el botón rojo parpadea; grabando en 3,2 1.
La Casa de la Juventud está ubicada en la Calle 24 # 27 A – 31 y los interesados en acceder a los espacios se pueden comunicar a los teléfonos 2441084 - Línea gratuita: 01 8000 127 007 - Atención al ciudadano: 327 97 97 Ext. 1100/1101/1136/1658 y presta los servicios de lunes a sábado de 7:00 am a 9:00pm.
Crónica y fotografía: John Jairo Gaitán Tarquino. Subdirección de Prácticas Culturales. SCRD