Debajo del Palo o Tierra del Sol, así se traduciría del muisca al castellano el significado de la palabra Usaquén, la tierra de la princesa Usaca amor del capitán Cortés. Usaquén, tierra de contrastes, de sacrificio, de contemplación, pero también de amor y dolor. Su paisaje así lo testimonia: de un lado los cerros orientales nutridos por bosques, paisajes paramunos recorridos por los vientos circulares del majestuoso Sumapaz, pero también y a su vez tropicales, con fuentes que van a descansar su raudo y luminoso caudal en una tierra llana, la Sabana de Bogotá, surcada de acequias y espejos de agua, llamados vergeles o humedales, donde las más variopintas aves venidas de otros y lejanos paisajes, descansan su vuelo mientras sacian su sed de agua y fecundación.
La riqueza de Usaquén es la de los elementos: aire, agua, tierra y fuego; sí, el fuego de las mujeres y hombres que han tejido su historia legendaria, de batallas y amores; su arte y su cultura trabajada por manos de artesanos, canteros, escultores o pintores; de músicos o poetas quienes en sus letras perciben los símbolos que se esconden tras la aparente o anodina cotidianidad de una localidad, la número uno de la ciudad de Bogotá. Y hablamos de arte y cultura, porque si bien la naturaleza es la mayor obra de arte y la expresión cultural por antonomasia, también pueblan esta naturaleza, esas personas, tú, ella, él o yo, quienes hoy y desde hace siglos habitamos como seres culturales que somos, este espacio prodigioso de naturaleza y arquitectura, de cultura y arte que llamamos Usaquén.
¿Sabemos vernos y reconocernos como seres culturales, como obras de arte irrepetibles? Seguramente sí, y por esto mismo, por esa necesaria mirada y reconocimiento de nuestro entorno y de nosotros mismos, desde hace más de 20 años existe un modesto espacio que busca aunar esfuerzos para proteger, preservar y crear nuestro espacio cultural, y que lleva por nombre, Consejo Local de Arte, Cultura y Patrimonio de Usaquén. Seguramente muchos de ustedes, otro tanto no, nunca antes habían escuchado hablar de este escenario cultural, el cual desde el anonimato y ad honorem, vela periódicamente por mantener viva la llama del Arte, la Cultura y el Patrimonio de Usaquén. Está conformado por mujeres y hombres como ustedes, quienes desde diferentes espacios culturales: adultos mayores, mujeres, jóvenes, raizales, comunidades afrocolombianas, artesanos, pintores, escultores, músicos, escritores y demás expresiones artísticas, se reúnen periódicamente para velar por la Cultura, por su importancia y libertad creativa; para invitar a que los alcaldes hagan visible en sus Planes de Desarrollo a la Cultura con mayúscula, y para que reconozcan en ella el fuego vital que sostiene el espíritu humano y, por ende, la importancia de mantener encendida esta llama de vida en la Tierra del Sol, Debajo del Palo, en la tierra testigo de los amores entre la princesa Usaca y el capitán Cortés.
El Consejo de Cultura, es un espacio de participación y, por ende, abierto a cada habitante de Usaquén. Si bien es un espacio democrático resultado de unas elecciones populares, no por ello o, mejor aún y por ello mismo, es de todos y cada uno de los habitantes de Usaquén. Necesitamos y además esperamos siempre contar con vuestros valiosos consejos y aportes. La protección y la creación de la Cultura es asunto de todos, y el Consejo Local de Arte, Cultura y Patrimonio de Usaquén es un instrumento de servicio cultural para beneficio del conjunto de la sociedad de Usaquén.
Consejo Local de Arte, Cultura y Patrimonio de Usaquén.
Texto: Consejero Julio Cesar Bustos Rodríguez
Registro fotográfico Consejo Local de Arte, Cultura y Patrimonio de Usaquén