María Daniela Sandoval Jurado, más conocida como Mada, es una artista urbana bogotana que a sus 31 años ha participado, por medio del graffiti, en numerosas iniciativas del Distrito e intervenciones artísticas de carácter comunitario. Su estilo resalta la feminidad, la naturaleza y la ancestralidad. A la fecha ha logrado representar a las mujeres grafiteras en países como Perú, Ecuador, Venezuela y Brasil.
Luego de su última participación en el evento “Mujeres Inspiradoras de Iberoamérica, el arte como instrumento de transformación social” realizado en la ciudad de Brasilia, Brasil, y convocada por la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, quisimos conocer más sobre su historia de vida y su trayectoria profesional, esas que la llevan hoy a convertirse también en la representante de la Mesa Distrital GraffitiGrafiti Mujeres de Bogotá.
¿Cómo inicia tu carrera en el arte urbano?
Mi carrera en el arte urbano inició en el 2008, cuando salí del colegio. Yo tenía curiosidad por saber cómo sería llevar mi arte a otras superficies y con otras técnicas, porque yo dibujo desde que tengo memoria, eso me facilitó pintar luego a gran escala, pero no fue sino hasta 7 años después de iniciar que empecé a ver los frutos de lo que había hecho durante tiempo.
¿Cómo fue la primera experiencia de pintar en el espacio público?
La primera que recuerdo en el espacio público fue en una marcha del 8 marzo, conmemoración del Día de la Mujer, era un mural móvil, creo que fue en 2008. Fue una experiencia tranquila, divertida, recuerdo que eran 3 murales móviles, tres lienzos en soportes con rueditas, que íbamos haciéndolo mientras caminábamos hacia la Pplaza de Bolívar. Esta primera intervención en el espacio público fue el inicio de lo que soy ahora, fue a pincel, nada de aerosoles.
¿Qué es lo que más te motiva para continuar por el camino del arte?
Realmente no hay una sola cosa que me motive más que los demás. Hay varias personas que componen estas ganas de seguir adelante con este proceso creativo, de ser artista urbana, de seguir aprendiendo y transformándome; me motiva mi familia, mi historia con ellos, lo que hemos vivido y superado, me motiva poder llevar algo bonito al día a día de las personas, lograr que se le transforme el día a alguien cuando pasa y ve un muro. Me motiva también seguir aprendiendo a tejer más en comunidad, la esperanza de la humanidad a pesar de todo. ¡Definitivamente para mi pintar es liberador!
¿De qué manera te integras a la Mesa Distrital de Grafiti Mujeres de Bogotá?
Supe de la Mesa entre 2014 y 2015, que fue cuando empecé a conocer todas las dinámicas que giran en torno al grafiti y al arte urbano en Bogotá. Antes de eso no tenía ni la más mínima idea de su existencia, además todo el tiempo trabajaba y estudiaba. Fue solo hasta el año 2021 que volví a tener contacto con la Mesa, se han venido realizando varios proyectos, y ahora soy la representante por votación desde marzo de 2022.
¿Cómo se da la oportunidad de viajar a Brasil a representar las mujeres grafiteras de Bogotá?
La experiencia fue maravillosa, muy enriquecedora. Mi travesía personal empezó el 17 de mayo, viajé de Bogotá a Leticia, luego a Tabatinga, después por ferri durante 3 días por el río Amazonas, llegué primero a Manaos, a un festival al que tenía planeado ir, y ya de Manos a Brasilia. Al día siguiente de mi llegada, nos conocimos todas las mujeres que participábamos, nadie se conocía ni las artistas, ni las funcionarias. La charla con el profesor fue maravillosa, fue una investigación profunda sobre las mujeres inspiradoras de cada una de las ciudades, me conmovió bastante escucharlo hablar sobre Colombia. Por último, se realizó la intervención de unl muro.
¿Cómo ves el panorama para las mujeres en el arte urbano en Bogotá?
Lo veo muy bueno y prometedor, es alentador y motivador ver que cada vez hay más chicas sin miedo a expresarse, a mostrar su arte. Las diferentes herramientas digitales fortalecen los procesos de las mujeres y propician nuevas formas para vincularnos entre todas, así nos nutrimos de nuestras propias experiencias, solo se requiere de la voluntad de aprender y de hacer las cosas. En general, veo un panorama muy alentador.
Esta mujer inteligente, amorosa, creativa, valiente y noble, como se define ella misma, continúa superando retos día a día. La naturaleza es una de sus más grandes fuentes de inspiración, cree en ella, en su poder sanador y eso es justamente lo que plasma en sus obras, en donde también involucra al ser humano, a la espiritualidad y a los orígenes ancestrales.