Economía Cultural
Con base en las aproximaciones conceptuales de la UNCTAD (2010), la economía cultural es entendida como el funcionamiento del sistema económico del sector cultural, la producción de bienes y servicios culturales, y el comportamiento de los agentes, consumidores y actores institucionales asociados.
Economía Creativa
De acuerdo con la UNCTAD (2010) la economía creativa es el conjunto de actividades relacionadas con la creatividad y el capital intelectual, generadores de valor agregado, y desarrollo. Bajo este marco, impulsa la generación de empleo y el crecimiento económico, pero también es inclusiva y diversa, incorporando las dimensiones socioeconómicas, culturales y tecnológicas, que tienen como centro a las industrias creativas.
Industrias Culturales
La UNCTAD (2010) citando a la Unesco define las industrias culturales como aquellas que combinan la creación, producción y comercialización de contenidos que son abstractos y de índole cultural. Estos contenidos que pueden tomar forma de bienes y servicios, generalmente están protegidos por “derechos de autor”. Estas industrias están centradas en promover y mantener la diversidad cultural y asegurar el acceso democrático.
En Colombia, el CONPES 3659 de 2010 que establece la Política Nacional para el Desarrollo de las Industrias Culturales, entiende las “industrias culturales” como aquellos sectores productivos donde se conjugan creación, producción y comercialización de bienes y servicios basados en contenidos intangibles de carácter cultural, generalmente protegidos por el derecho de autor (DNP, 2010).
Industrias Creativas
Las industrias creativas están en el centro de la economía creativa, y son definidas por la UNCTAD (2010) como: los ciclos de creación, producción y distribución de los bienes y servicios que tienen como base fundamental la creatividad y el capital intelectual. Estas industrias abarcan un conjunto productivo más amplio que el de las industrias culturales, pues, además de los bienes y servicios culturales, también incluyen aquellos que dependen de la innovación y tienen su origen en la creatividad (Unesco & PNUD, 2014).
Economía Naranja
“El conjunto específico de actividades basadas en la creatividad que de manera encadenada, permiten que las ideas se transformen en bienes y servicios culturales, cuyo valor está determinado por su contenido de propiedad intelectual.” (BID, 2013)
Emprendimiento Cultural
Según la UNCTAD (2012), un emprendedor es un individuo que identifica oportunidades en el mercado, asigna recursos y crea valor. El emprendimiento, el acto de ser emprendedor, implica la capacidad y la voluntad de emprender la concepción, organización y gestión de una nueva empresa productiva, aceptando todos los riesgos que conlleva, y buscando beneficios y ganancias como recompensa. En economía, el emprendimiento a veces se considera un factor de producción, igual que la tierra, la mano de obra, los recursos naturales y el capital.
El emprendimiento cultural, es entendido por la Unesco (2010) como: una iniciativa o proyecto cultural y creativo con un plan de viabilidad que lo hace económicamente sostenible o en vías de serlo en una institución o empresa cultural.
Bienes y servicios culturales y creativos:
De acuerdo con la UNCTAD (2010), Los bienes y servicios culturales son aquellos que tienen un valor cultural agregado al valor comercial y que ese valor cultural no sea totalmente cuantificable en términos monetarios. Son bienes y servicios que:
- Requieren de algún tipo de aporte de la creatividad humana
- Son vehículos para mensajes simbólicos a aquellos que los consumen
- Tienen cierto grado propiedad intelectual, lo que es atribuible al individuo o grupo que los produce
Definida de una u otra manera, los “bienes y servicios culturales” pueden ser considerados como un subconjunto del amplio grupo denominado “bienes y servicios creativos”, cuya producción requiere un importante nivel de creatividad. Asimismo, la categoría “creativa” se extiende más allá de los bienes y servicios culturales, incluyendo productos como software y moda.