Esta plataforma de acompañamiento para creadores de la ciudad comparte su experiencia como beneficiaria del programa distrital de Apoyos Concertados, los desafíos que ha enfrentado durante la pandemia y los retos que avizora para el sector.
‘Bogotá, un sistema para crear y crecer’ es el proyecto que la plataforma Conexiones Creativas viene realizando desde 2019 con recursos del Programa Distrital de Apoyos Concertados. Concebido como una plataforma de acompañamiento cercano a creadores y colectivos culturales, ha beneficiado a más de 400 proyectos con talleres, conferencias, clases maestras y asesorías individuales.
Se reconocen como un think & do tank, un equipo flexible y adaptativo orientado a diseñar estrategias para reflexionar y para el hacer con otros. Ese pensamiento y acción se despliega en forma de investigaciones, asesorías, programas y proyectos especiales con y para regiones, organizaciones, empresas y creadores. Todas estas, iniciativas orientadas a procesos de planeación, crecimiento, transformación e innovación.
Para conocer la experiencia de adaptación y crecimiento en 2020 de uno de los proyectos ganadores del PDAC, conversamos con Paula Trujillo, directora de Estrategia de Conexiones Creativas.
Dirección de Fomento: Paula, ¿qué es Conexiones Creativas?
Paula Trujillo: Somos una plataforma que desde el 2013 desarrolla una intensa agenda entre Europa y América en pro de los ecosistemas creativos y culturales. Trabajamos con regiones y gobiernos, con instituciones tipo cámaras de comercio, gremios o cajas de compensación y, por supuesto, con creadores y empresas. Como think + do tank contamos en el corazón de nuestra agenda con El Monitor, un observatorio iberoamericano de economía creativa que incluye investigaciones, publicaciones, una hemeroteca y un despliegue amplio de contenidos. Y luego tenemos acciones que van desde las consultorías hasta los programas de formación y fortalecimiento, los workshops, los experience tours, entre otros.
D.F: ¿Cómo nació el proyecto Bogotá un ecosistema para crear y crecer, ganador de la convocatoria 2020 del PDAC? ¿Cómo fue su génesis?
P.T.: Nacimos en 2013 con un gran proyecto en Bogotá llamado el Campus Colombias, que congregó durante tres días a 1.400 creativos. Así que siempre hemos sentido a Bogotá como nuestra casa. Estos lazos profundos con los creadores, pero también con el tejido institucional de esta ciudad, nos han permitido desplegar desde 2019 el programa ‘Bogotá, un ecosistema para crear y crecer’, que ha beneficiado cada año a más de 400 proyectos a través de un programa de formación y asesoría con temas punteros y voceros de relevancia nacional e internacional. Esto ha sido posible gracias al apoyo de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte. Muchos de estos creativos hoy son parte de la familia Conexiones Creativas pues hemos sido testigos de sus retos, de sus esfuerzos y de sus avances. ¡Nos sentimos comprometidos profundamente con los creadores y proyectos bogotanos!
D.F: ¿Cuáles fueron las transformaciones hechas al proyecto para adaptarse a la situación actual? ¿Qué aprendizajes vale la pena compartir?
P.T: En las versiones previas todos los espacios sucedían presencialmente a través de sesiones magistrales, workshops o experience tours, en los que cuidábamos profundamente la experiencia, los detalles, los lugares, el material impreso, el refrigerio... nos sentíamos muy cómodos con la cercanía, por supuesto.
Para 2020, como todos, nosotros también tuvimos que hacernos todas las preguntas y repensar por completo nuestros formatos. Hicimos un serio ejercicio de benchmark de plataformas digitales y preferimos hacer una inversión importante pagando mensualmente las que nos parecían más profesionales y confiables. El gran reto era cuidar al máximo la experiencia de los participantes, así como lo hacíamos antes en lo físico.
Hemos sido cuidadosos de los participantes con un esquema de comunicación uno a uno, vía email, WhatsApp o llamada, e incluso les enviamos casa un kit a los que han sido más constantes para ratificar que son parte de este programa y que somos sus aliados.
Nuestra apuesta ha sido lo ‘omnicanal’, combinando las clases maestras con workshops virtuales, con asesorías a la medida, con píldoras audiovisuales, con sesiones en vivo en Instagram, con un canal de YouTube activo, con publicaciones y kit de herramientas, lanzando nuestro canal de podcast y haciendo ese seguimiento uno a uno para buscar un esquema 360 grados con diversas propuestas de modo que se entiendan los retos de conectividad y tiempo que hoy todos tenemos. En 2020 el slogan que le hemos dado al proyecto es: “Ajusta el plan, pero no renuncies a la meta”.
D.F: ¿Cómo ven desde Conexiones Creativas los procesos de adaptación del sector? ¿Cuáles son los mayores retos?
P.T: Lo presencial ha sido históricamente el terreno de los agentes del ecosistema creativo y cultural y no debemos perderlo pues la cercanía física en este periodo del gran confinamiento es ahora más necesaria que nunca; pero desde la omnicanalidad hay todo un universo por explorar lleno de oportunidades para nuestro sector si trabajamos de manera más transdisciplinar y conectándonos con nuestros pares del universo de las nuevas tecnologías. Conscientes de este tema hemos hecho un especial énfasis en este 2020 a contenidos como la inteligencia artificial y las nuevas tecnologías, o posicionando un concepto que venimos trabajando desde hace un año llamado ‘Polinización cruzada’.
D.F: ¿Cómo abordar el tema de audiencias y comunidades o grupos de interés, en este momento en el que no se puede ver al otro la mayor parte del tiempo?
P.T: La formación de públicos y la gestión de audiencias siempre ha sido un tema central en la conversación de este ecosistema, y este 2020 ha acelerado los debates no solo por la virtualidad sino por las nuevas generaciones. Este año ha puesto en escena una polifonía de contenidos y solo aquellos programas o instituciones que han hecho una tarea juiciosa de cuidar a sus comunidades siguen en agenda.
No creemos en volcarnos de manera acrítica al mundo digital, pero sí es momento de incorporar con seriedad y agilidad reflexiones sobre nuestra relación con las tecnologías en busca de dinámicas más omnicanal. El gran confinamiento ha traído dinámicas de las que con o sin vacuna será difícil salir: nos ha enseñado, por ejemplo, que el teletrabajo es posible o que muchos desplazamientos se pueden reemplazar con una teleconferencia o que los creadores de las TIC son nuestros aliados en dinámicas hacia lo inmersivo.
D.F: Ustedes llevan dos años recibiendo recursos del Programa Distrital de Apoyos Concertados… ¿Cómo ha sido hacer parte del PDAC?
P.T: Un gran reto y un gran aprendizaje desde la gestión de los proyectos. Hemos crecido infinitamente estos años en los temas contables o administrativos por ejemplo, dándonos el orden y rigor de quién se debe entender ya como una organización que trabaja con fondos públicos. Gracias a esto, hoy trabajamos mucho con entidades gubernamentales, cámaras de comercio y fondos de cooperación, pues nuestros procesos están a la altura de sus expectativas.
D.F: Finalmente, ¿cuál creen ustedes que debe ser la labor del estado frente a los retos del sector?
P.T: El Estado es una gran mesa que estimula, permite, incentiva y motiva las conversaciones, dinámicas y proyectos que el ecosistema creativo y cultural incuba en su seno.