Este juego se hace en fila, niños y niñas intercalados, tomados de la mano, y van moviéndose para hacer diferentes figuras. Los jugadores deben ser mayores de 4 años y mínimo un grupo de ocho.
Van cantando una y otra vez la siguiente canción, siguiendo al jugador que encabeza la fila, sin soltarse las manos y caminando.
Salí de La Habana un día,
Camino de San José
Y en el suelo me encontré
Un papel que así decía:
La fila de niñas y niños, al ir andando, va formando diferentes figuras como el ocho, el caracol como una espiral, el túnel, cruzando unos en medio de los otros sin soltarse y la serpiente, girando hacia un lado y luego hacia el otro, justamente como se mueve una serpiente.
Salí de La Habana un día,
Camino de San José
Y en el suelo me encontré
Un papel que así decía:
Este juego ayuda a moverse coordinadamente con otros niños y niñas, estimula la habilidad musical, y fomenta la socialización. Se puede jugar al aire libre ó en un salón grande, sin sillas.
Salí de la Habana un día